Conmigo no tienes que fingir. No tienes que decir nada. Si me necesitas, silba. Sabes silbar, ¿no? Sólo tienes que juntar los labios y soplar. Y yo acudiré a tu llamada.




samedi 20 mars 2010

(sin) autocontrol


¡QUE TIEMBLE EL ASFALTO!

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire